Como cada año, a principios de octubre los alumnos del MIDI hemos viajado a Madrid como parte de las actividades formativas del máster. Durante tres intensos días hemos podido reencontrarnos con nuestros compañeros de clase, visitar plantas de producción y charlar con exalumnos de antiguas promociones de nuestro máster.
El primer día, tras un intenso madrugón, llegamos a Alcalá de Henares para visitar una de las plantas de producción de Laboratorios Rovi. Allí, tuvimos la oportunidad de conocer de primera mano cómo es el proceso de fabricación de distintos medicamentos, complementando sobre el terreno los conocimientos adquiridos durante nuestras clases teóricas.
Aquella misma tarde y tras instalarnos en el hotel, acudimos a la sesión MIDI Conecta, donde antiguos alumnos de nuestro máster nos hicieron partícipes de su experiencia en el mundo de la industria farmacéutica. Posteriormente, pudimos charlar con ellos de manera más distendida, en lo que también fue una oportunidad para conocer de primera mano la realidad de la industria en la que todos nosotros esperamos trabajar.
Al día siguiente y todavía recuperándonos de una noche de reencuentros, pusimos rumbo hacia Tres Cantos, donde visitamos el centro de Diseases of the Developing World de la multinacional GSK. Aquí pudimos comprobar cuáles son las diferencias existentes en un centro de I+D de financiación privada en comparación con un centro público. Por si nos había quedado alguna duda, después de esta visita pusimos rumbo al CNIO, el segundo mejor centro de investigación contra el cáncer de Europa, poniendo fin a una mañana repleta de explicaciones sobre High Throughput Screening y la microscopía confocal.
Aquella tarde acudimos a la Real Academia Nacional de Farmacia para, curiosidades de la vida, escuchar hablar al CEO de 3P Biopharmaceuticals, empresa situada a escasos kilómetros de Pamplona. Tras una elegante cena en la capital y un intento de visita a los bien conocidos bares de Malasaña, volvimos al hotel con mucho cansancio pero también muchas ganas de afrontar el último día que nos quedaba en la capital.
Así las cosas, el viernes por la mañana nos sumergimos en el denso tráfico de la A2 camino a Azuqueca de Henares, Guadalajara, para visitar las plantas de producción del Grupo Chemo, donde quién sabe, quizá acabemos trabajando alguno de nosotros. Tras las siempre dolorosas despedidas, desde la provincia castellanomanchega nos separamos, unos de vuelta a Madrid, otros de vuelta a Pamplona, pero siempre con el buen sabor de boca de tres días llenos de experiencias.
By Javier Sánchez, Alumno MIDI 29
